Llevaba una temporada queriendo probar como con las cámaras recientes, y sin apenas "hardware" extra, se podía conseguir alguna imagen de espacio profundo.
Se que las imágenes que vemos por internet y en los libros están tomadas con potentes equipos, desde cámaras modificadas para trabajar en espectros de color diferentes a los normales, trípodes super estables, telescopios ópticos de varios miles de euros, trackers para conseguir exposiciones mucho más largas, además de software especializado y variado para el procesado de las imágenes obtenidas.
Sabiendo todo esto, y admirando el trabajo que realizan aquellos que logran estas imágenes, yo quería poner a prueba mi equipo, mi software y mis nociones de procesado de imágenes de cielo nocturno.
Contando con ello, hace unos días subí a la azotea de mi edificio, para realizar la tercera sesión, la de despedida, del "cometa verde" que nos ha acompañado en esta entrada de año. Mientras realizaba la sesión, observa un ligera mancha de luz bajo el Cinturón de Orión. Intuía que era la Nebulosa de Orión, como más tarde me confirmó un compañero más ducho en estos menesteres astronómicos. Así que me propuse volver a pasar una noche fría sobre la ciudad e intentar sacar algo de lo que allí se veía.
La noche ha sido hoy, he subido con un equipo básico, trípode de aluminio magnesio de la marca Benro, el TRAVEL ANGEL 2690T, junto al rótula B1 PRO, mi querida CANON EOS 5D MARK IV, y teleobjetivo TAMRON 150-600 G2, y nada más.
Después de ubicar el Cinturón de Orión, con una vista amplia del cielo, hice los cálculos necesarios para sacar una vista en detalle de la zona más llamativa de esta parte del cielo nocturno.
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| Una vista amplia de la zona bajo el Cinturón de Orión. F/6,3, 0,5 s, ISO 6400 |
Usando el zoom digital sobre la pantalla de la cámara, localicé la zona que quería intentar sacar, y conociendo el funcionamiento de mi cámara, me propuse disparar sin llegar al limite de ISO de la misma, para que con el grano generado no se estropeara mucho el detalle de la imagen.
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| Nebulosa de Orión. F/6,3, 0,5 s, ISO 6400 |
La imagen final, esta que tenéis arriba, es el resultado de procesar el RAW de la cámara con DxO PureRAW 2, consiguiendo un archivo DNG con el máximo detalle e información posible, que luego pasó por Adobe PHOTOSHOP CC 2023, y editado con CameraRAW, con algunos ajustes para oscurecer el cielo profundo, destacar el brillo de las estrellas, detallar la bruma que rodea el elemento más importante y ajustar los colores.
El resultado, para mi, es una auténtica gozada, y más teniendo en cuenta que está sacada desde plena ciudad.
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